Page 499 - Fisica General Burbano
P. 499

CAPÍTULO XXII



                                                             CORRIENTES INDUCIDAS







                                A) LEYES DE FARADAY Y DE LENZ

          XXII – 1. Introducción
             Cuando comenzamos el estudio del Magnetismo hacíamos una revisión de algunos fenómenos
          en los que se ponían de manifiesto las interacciones magnéticas, y poníamos especial interés en re-
          saltar la conexión de los fenómenos magnéticos con los eléctricos, llegando a concluir que el Mag-
          netismo no es más que una parte de la Electricidad.
             En capítulos anteriores hemos considerado generalmente al campo eléctrico y al magnético
          como independientes del tiempo, es decir, en condiciones estáticas; tratamos de manejar las situa-
      MUESTRA PARA EXAMEN. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN. COPYRIGHT EDITORIAL TÉBAR
          ciones en las que éstos son variables con el tiempo.
             Como consecuencia de este estudio, que fue iniciado por Michael Faraday en Inglaterra y por
          Joseph Henry (por separado) en EE.UU, en los alrededores de 1831, se abre el camino para la
          conversión práctica de la energía mecánica en eléctrica y viceversa, dando comienzo a la segunda
          revolución industrial. Además, estos estudios son esenciales para la comprensión de los fenómenos
          electromagnéticos, cuya importancia está a la vista y es fundamental para nuestra forma de vida
          actual (corrientes alternas, dínamos, motores, comunicaciones, ondas electromagnéticas, ... etc).
          XXII – 2. Diversos experimentos por los que se ponen de manifiesto las corrientes
                   inducidas
             EJEMPLO 1. Si a un circuito cerrado que tiene un galvanómetro intercalado
          G (Fig. XXII-1) se le acerca o se le aleja un imán o un electroimán se observa
          que el galvanómetro acusa un paso de corriente. En el circuito ha aparecido
          una FEM inducida capaz de hacer circular tal intensidad.
             Además, observando el galvanómetro vemos que si se acerca o se aleja el
          imán o el electroimán y según se acerque un polo u otro, la corriente circula
          en los sentidos indicados en la Figura XXII-1, es decir:
             Al acercar un polo N se origina en el circuito una cara N que lo repele.
             Al acercar un polo S se origina en el circuito una cara S que lo repele.
             Al alejar un polo N se origina en el circuito una cara S que lo atrae.
             Al alejar un polo S se origina en el circuito una cara N que lo atrae.
             EJEMPLO 2. Consideremos un campo magnético uniforme perpendicular al
          plano de la Fig. XXII-2 y confinado en un cierta región (línea de puntos). Una
          espira conductora se introduce dentro del campo magnético observándose
          paso de corriente en el galvanómetro siempre que la espira se mueva. Si se
          para cesa la corriente y según se «meta» o se «saque» del campo, la corriente
          circula en un sentido o en otro. Nuevamente ha aparecido una FEM inducida
          que es la que hace que circule corriente por la espira.
             Observamos en el galvanómetro que:                           Fig. XXII-1.– Cuando un imán se mueve hacia, o aleján-
             Si el campo va hacia dentro y se «mete» la espira, la corriente circula en  dose de una espira, en ésta se produce una corriente eléc-
                                                                          trica en los sentidos indicados para cada caso.
          sentido contrario a las agujas de un reloj.
             Si el campo va hacia dentro y se «saca» la espiera, la corriente circula en el
          sentido de las agujas del reloj.
             Si el campo va hacia fuera y se «mete» la espira, la corriente circula en el sentido de las agujas
          del reloj.
             Si el campo va hacia fuera y se «saca» la espira, la corriente circula en sentido contrario a las
          agujas de un reloj.
             EJEMPLO 3. Si hacemos girar un circuito dentro de un campo magnético (Fig. XXII-3) se origi-
          na en él una corriente inducida que durante media vuelta va en un sentido y en la siguiente media
          vuelta va en sentido contrario (ver «corrientes alternas»).                    Fig. XXII-2.– El campo magnético
                                                                                         uniforme se encuentra confinado
             EJEMPLO 4. Supongamos que tenemos una espira con un galvanómetro y paralela a ella hay  dentro de la región limitada por la lí-
          otra espira conectada a una pila y a una resistencia variable (Fig. XXII-4), de tal manera que si  nea de puntos. Según se «meta» o se
          modificamos el valor de la resistencia, la intensidad que circula en ese segundo circuito varía, y por  «saque» la espira de dicha zona, la
          tanto, también el campo magnético que produce, apareciendo un paso de corriente por el primer  corriente eléctrica inducida circula en
          circuito que es acusada por el galvanómetro. El galvanómetro no es afectado (no existe paso de  uno u otro sentido.
   494   495   496   497   498   499   500   501   502   503   504